kpi

Tanto en el mundo del marketing como en otros sectores empresariales, contar con indicadores que hagan comprender la planificación y la evolución de cada proyecto es vital. De esta manera, surge el KPI, un indicador que ayuda a conocer en todo momento el estado de nuestros objetivos, así como plantear otros nuevos de cara al futuro.

Si quieres conocer todo sobre el KPI, sus tipos y cuál es la mejor forma de definirlos, quédate con nosotros porque vamos a explicártelo todo.

¡Comenzamos!

Qué es un KPI

Un KPI es un indicador o métrica que sirve para determinar y resumir la eficacia y consecución de nuestras acciones y objetivos. Sus siglas significan Key Performance Indicator, algo así como indicador de claves de desempeño.

En el mundo del marketing digital actual, contar con una serie de KPIs que nos ayuden a comprender la evolución y el desarrollo de nuestras estrategias es crucial. Y es que no hay un buen plan que no contenga una serie de KPIs para sostener su viabilidad, así como modificar su rumbo si fuera necesario en base a la consecución de los objetivos.

Como ya estarás pensando, efectivamente, no hay un solo tipo de KPI. Por lo tanto, en el siguiente punto vamos a hablar de los principales tipos de KPI que pueden aplicarse en un plan o estrategia de marketing.

Principales tipos de KPI según su naturaleza

A continuación, vamos a hablar de los principales tipos de KPI en base a su naturaleza, es decir, a lo que están destinados. Se trata de una clasificación general de los KPI, pues en cada sector podemos encontrar una serie de KPIs determinados y clasificaciones en base a su función.

Los principales tipos de KPI son:

  • Cuantitativo. Es el tipo de KPI más común cuando se habla de estas claves de desempeño. Determina cifras a conseguir (ventas, seguidores, leads… etc.).
  • Cualitativo. Hace referencia a opiniones y valoraciones.
  • Temporal. Mide la consecución de objetivos en tramos específicos de tiempo, ya sea a corto, a medio o a largo plazo.
  • De predicción. Trata de analizar los elementos que influyan en el futuro.
  • Histórico. Sirven de referencia para indicarnos los resultados pasados.

Los KPIs tendrán una serie de divisiones específicas en su tipología, dependiendo el ámbito empresarial y dentro de estos, dependiendo de su aplicación práctica.

tipos de kpi

Por ejemplo, encontraremos KPIs específicos para marketing digital, para redes sociales, para ventas, para logística…etc. Y dentro de cada sector mencionado, existirán KPIs propios para medir diferentes aspectos (número de seguidores, conversiones, leads, número de pedidos, porcentaje de material vendido…).

Sin embargo, llegados a este punto surge la gran pregunta: ¿Cómo se definen los KPIs para que estos sean efectivos y nos ayuden con nuestra estrategia? En el siguiente punto te lo contamos.

Cómo se define un KPI

Ya hemos visto lo que es un KPI y los principales tipos que puede presentar. Sin embargo, a la hora de poner en práctica este indicador, debemos establecer una serie de parámetros para definirlos.  Aquí entra en juego la archiconocida metodología S.M.A.R.T. que nos ayudará a establecer KPIs claros y eficaces.

Antes de pasar a describir esta metodología para definir tus KPIs debes tener muy claros tus objetivos, puesto que estos indicadores sirven para determinar si nos acercamos o no a ellos. Si no contamos con unos objetivos definidos, va a ser muy difícil que el KPI en cuestión tenga sentido.

Así pues, la metodología S.M.A.R.T para definir un KPI consiste en las siguientes cualidades:

Specific/Específico

Un KPI debe ser específico, es decir, marcar claramente aquello que se quiere conseguir. Cuanto más concreto, mejor será el KPI. No podemos divagar ni establecer objetivos muy generales, puesto que nos será mucho más complicado medirlos.

Mesurable/Medible

Si no se puede medir, no es un objetivo claro. Establece una cuantificación de aquello que quieres lograr para que el KPI pueda darte el dato concreto de la evolución en tu proyecto.

Attaiable/Alcanzable

Debemos ser realistas con lo que queremos conseguir. Aquí nos vendrán muy bien los KPIs históricos antes nombrados, pues nos servirán para tomarlos como base de cara a conseguir nuevos objetivos. Si establecemos metas enormes nada más comenzar o ponemos unos objetivos que no se corresponden con la realidad de nuestro sector, estaremos errando con nuestros KPIs.

Relevant/Relevante

Esta característica determinará por qué el objetivo a conseguir es interesante y beneficioso para tu empresa. Cuando establecemos objetivos no debemos olvidarlos de su razón de ser para comprender por qué estamos trabajando en conseguirlo y de qué manera podemos hacerlo, es decir, qué queremos conseguir.

Timely/Establecido en el tiempo

Por último, debemos indicar cuándo queremos lograr estos objetivos, en qué plazo queremos que se lleven a cabo, cuánto tiempo creemos que nos puede abarcar…etc. De esta manera, a medida que avancemos con nuestro plan, estaremos comprobando si realmente cumplimos nuestros KPIs o no.

kpi smart

Aquí llegamos al final de nuestro pequeño viaje por el mundo del KPI. Si te ha sido de ayuda, no olvides compartir este artículo en tus redes sociales para que más personas puedan conocer qué es un KPI.